Dermatología Clínica Veterinaria

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Artículos

Sarcomas y vacunación en gatos: ¿cuál es su verdadera relación?

J Rejas López
Publicado en CONSULTA de Difusión Veterinaria, 1998, 6 (47): 17-18.

Antecedentes

Tras siete años de especulaciones, la relación de la vacunación de gatos con la aparición de sarcomas en el punto de inyección sigue presentando aspectos controvertidos. Aunque se ha relacionado la vacunación en gatos con distintos tipos de sarcomas (fibrosarcomas, rabdomiosarcoma, condrosarcomas, histiocitomas fibrosos malignos y osteosarcomas), desde un inicio se ha venido hablando en general de fibrosarcomas. La evolución de esta historia podría resumirse así:

  • En 1991, Hendrick y Goldschmidt, de la Universidad de Pensilvania, envían una carta titulada Do injection site reactions induce fibrosarcomas in cats al Journal of the American Veterinary Medical Association (JAVMA, 199, 968), en la que relatan que en los últimos años han observado un incremento del número de fibrosarcomas en puntos de la piel usualmente utilizados para la vacunación de gatos (espacio interescapular, área dorsal del cuello, etc), coincidiendo este hecho con la entrada en vigor, en ese Estado, de la obligatoriedad de la vacunación antirrábica en gatos, hecho que se produce en 1987.
  • En 1993, Kass y col., de la Universidad de Davis (California), publican en la misma revista (JAVMA, 203, 396- 405) los resultados de una encuesta realizada sobre 345 fibrosarcomas felinos. La encuesta destaca que un gato vacunado frente a la leucemia felina tiene un riesgo entre 2,8 y 5,5 veces superior de sufrir un fibrosarcoma que un gato no vacunado. En el caso de la vacunación antirrábica el riesgo es 1,83 a 2,09 veces mayor.
  • Casi simultáneamente, en 1994, Hendrick y col. (JAVMA, 205, 1425-1429) publican los resultados de otra encuesta con 239 fibrosarcomas felinos. Según la encuesta existe una relación entre los fibrosarcomas en los puntos de inyección y la vacunación frente a la leucemia felina (un riesgo 2,92 veces mayor respecto de los gatos no vacunados), pero no con la vacunación contra la rabia.

Antes de continuar, es importante destacar que en ningún caso se ha relacionado la aparición de fibrosarcomas con la vacuna de un fabricante en particular.

Estado actual

La prevalencia anual del fibrosarcoma inducido por la vacunación es de todas formas baja, estimándose actualmente entre 1 y 4 por cada 10.000 felinos vacunados, aunque algunos autores la suben hasta 10 por 10.000. En 1993, Esplin y col. (JAVMA, 202, 1245-1246) la cifran entre un 1 y 2 por 10.000 gatos vacunados, mientras que en la encuesta de Kass y col. se calcula que 2 de cada 10.000 gatos vistos en consulta presentan fibrosarcomas, aunque sólo un 25% de los mismos tendría un origen vacunal; no debemos olvidar que no todos los fibrosarcomas cutáneos felinos tienen un origen vacunal, ni siquiera aquéllos ubicados en lugares usualmente utilizados para inyectar la vacuna. Sin embargo, recientemente Coyne y col. (1997) estiman entre 2,7 y 3,6 por 10.000 gatos la prevalencia del fibrosarcoma en puntos de inyección, en base a una encuesta realizada en 1992 entre los miembros de la American Association of Feline Practitioners.

Etiopatogenia

Poco se sabe sobre cuál puede ser el factor inductor del tumor. Se ha propuesto al aluminio (que actúa como adyuvante en algunas vacunas), debido a que se ha encontrado este elemento en el interior de macrófagos en algunos de los fibrosarcomas, aunque actualmente también parece clara la relación de fibrosarcomas con vacunas sin adyuvantes. De todas formas, se sabe que los felinos están más predispuestos a desarrollar tumores en los sitios de inyección que otras especies animales, y así se ha observado la aparición de sarcomas en puntos de inyección de antibióticos y de corticoides.

Respecto a otros puntos de interés, no se ha encontrado un mayor riesgo en el uso de vacunas polivalentes, respecto de las univalentes. Sin embargo, en la encuesta de Kass y col. se observa un incremento de la frecuencia según aumenta el número de vacunaciones recibidas en un mismo punto, aspecto no refrendado en la encuesta de Hendrick y col.

Cuadro lesional

En gatos se definen, microscópicamente, al menos tres lesiones cutáneas observadas en los lugares de vacunación: la paniculitis nodulosa, los fibrosarcomas, y la paniculitis con fibrodisplasia (lesión preneoplásica de transición entre las dos anteriores). En algunas ocasiones, en las tres semanas siguientes a la vacunación, se desarrolla la primera de las lesiones, inflamatoria, en el área de inyección, la cual suele desaparecer en 1-3 meses; la lesión se caracteriza por un nódulo subcutáneo blando que aparece al poco tiempo en el sitio de la vacunación, y que puede estar o no adherida a la piel; la piel que recubre el nódulo generalmente es normal aunque puede estar alopécica y presentar costras. Si la lesión persiste en el tiempo, a veces se transforma en un fibrosarcoma; el tumor aparece generalmente durante el primer año tras la vacunación, aunque se han citado casos hasta de tres años y medio.

El fibrosarcoma inducido por la vacunación tiene unas características peculiares:

  • Las metástasis son infrecuentes, localizándose en su caso principalmente en pulmones aunque también pueden encontrarse por ejemplo a nivel hepático.
  • Sin embargo, las recidivas son muy frecuentes: 86% a los seis meses de la resección quirúrgica; además en un 22% de los casos las recidivas son múltiples, entre 2 y 4 veces.
  • Finalmente, es un tumor agresivo, de rápido crecimiento y altamente invasivo.

Tratamiento

El hecho de las frecuentes recidivas aconseja que la resección del tumor asegure amplios márgenes, ya que microscópicamente se extiende mucho más allá de la masa palpable. Para mejorar el índice de éxitos LaRue y Kitchell (1997) recomiendan administrar radioterapia antes de la resección quirúrgica; además cuando, tras la resección, el estudio histopatológico revela que los márgenes de la misma pueden ser insuficientes, se administran nuevas dosis de radioterapia. Incluso, para prevenir la aparición de metástasis, estos autores recomiendan la administración simultánea de quimioterapia.

Implicaciones y actuaciones futuras

No cabe duda que el riesgo de que un animal no vacunado adquiera la leucemia felina es muy superior al que tiene un gato vacunado de sufrir de un fibrosarcoma en el punto de la inyección, por lo que si bien es necesario conocer la existencia de una relación entre la aparición del tumor en el lugar de vacunación y la aplicación de la vacuna, no existe ninguna duda sobre el hecho de que se debe seguir vacunando a los gatos cuando sea necesario.

El establecimiento de la relación vacunación-fibrosarcoma ha hecho que se propongan una serie de medidas encaminadas a conocer realmente qué relación existe y, a la vez, disminuir la incidencia de este tumor (tabla). Para ello se ha creado en EE.UU. la Vaccine-Associated Feline Sarcoma Task Force, coalición de organizaciones veterinarias que pretende definir la causa exacta, la verdadera importancia del problema, y el tratamiento más efectivo; estos objetivos tardarán al menos un lustro en ser conseguidos.

Finalmente, aunque sería deseable realizar un estudio de prospección para establecer qué relación existe, en la práctica no es posible, ya que por ejemplo sólo en EE.UU. existen 71 vacunas autorizadas para felinos; según esto, se tendrían que vacunar 71.000 gatos (1.000 por vacuna) y esperar alrededor de tres años para ver si un solo gato (por tipo de vacuna) presenta el fibrosarcoma.

Bibliografía recomendada

Affolter VK. (1997) Preneoplastic diseases in dogs and cats. Proceedings of the 14th Annual Congress of the European Society of Veterinary Dermatology, 109-111.
Coyne MJ, Reeves NCP, Rosen DK, Postorino-Reeves NC. (1997) Estimated prevalence of injection-site sarcomas in cats during 1992. JAVMA, 210, 249-251.
Doliger S. (1994) Epidémiologie du fibrosarcome du chat. Proceedings of the 1st European Congress of the Federation of European Companion Animal Veterinary Associations, 871-873.
Kass PH. (1996) The epidemiology of vaccine-associated sarcomas in cats. Proceedings of the North American Veterinary Conference, 539-540.
LaRue SM, Kitchell BE. (1997) The latest news on vaccine induced sarcomas in cats. Proceedings of the North American Veterinary Conference, 391-394.

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